Según Merino (2014) el estudio dio como resultado de que realizar estrategias de Branding en una ciudad contribuye a ponerla en valor, creando una mejor reputación y contribuye al desarrollo de su industria turística dando lugar a nuevos negocios y trabajos para la comunidad y atractiva para atraer inversiones.

 

En esta estrategia se logró integrar la marca de producto que está dirigido a satisfacer y aumentar la decisión de compra y la marca destino que despierta el orgullo y la sensibilidad local (Merino, 2014).

 

Para lograr la promoción de la ciudad debe contar con una buena administración a largo plazo e inversión sostenible. Las regiones del Perú deberían crear sus marcas turísticas tomando como base los lineamientos de la marca país (Merino, 2014).

 

La marca destino es importante que este acompañada con la participación de la comunidad y representantes del sector privado para evitar que sea politizada. En la investigación se observó que la marca destino no fue validada por los diferentes actores de la comunidad por lo cual no hay un consenso (Merino, 2014).

 

Otra observación que se pudo detallar en la investigación es la falta de un análisis comparativo con otras marcas de las distintas ciudades destino de Perú con lo que logro que la marca sea totalmente diferente en su aspecto visual (Merino, 2014).